Primero de todo, y a petición unánime de todos los transibericos (aunque iniciada por Joan de Arbucies!!!): saludos afectuosos a todas sus parejas. Esas chicas estupendas que, mientras ellos se van a hacer el cabra por tierras italianas, se han quedado en casa pacientemente. Dicen que os quieren muchooo!!!
Segundo: saludos al endurero dado520max, del Blacksmith pub de Uras. Un italiano muy majo que han conocido cuando han parado a comer. Si vais a Cerdeña en moto, no dudéis en pasaros por Uras y buscad el pub. Seréis bien tratados.
Y porque tanto saludo para empezar? Pues porque hoy ha sido una etapa tranquila y placentera. Sin averías, ni caídas, ni problemas con el track. Genial para ellos, sí, pero a mí me lo ponen un poco difícil… ahora con que me enrollo?
…
El día empezaba soleado. Antes de empezar con el track, se han acercado a ver las famosas dunas de la Costa Verde, algunas de hasta 60 metros! Recuerdan un montón a los hábitats saharianos. Aunque ha sido solo mirarlas, está prohibido meterse con la moto por las dunas (pero fijo que la tentación estaba allí!).
La etapa de hoy les ha llevado en primer lugar hacia una zona de minas de hierro abandonadas. Subida entretenida bordeando (y vadeando) un pequeño rio. Destacar el peculiar color del agua, pues como contiene mineral de hierro, tiene un tono rojizo muy chulo.
El tramo de la mina estaba muy chungo y prácticamente intransitable o sea que han cogido un trocito de carretera hasta enlazar de nuevo con el track.
El paisaje ha empezado a cambiar. Montaña ‘de verdad’. Subiendo por un cortafuego con vistas al Golfo de Oristano. Precioso! Y como todo lo que sube baja, a continuación han bajado hasta el nivel del mar, hasta encontrarse con las ruinas romanas de Tharros (estilo Ruines d’Empuries, para que nos entendamos). Iban bien de tiempo, por lo tanto han parado a estirar las piernas y a pasearse por las ruinas. Y conociéndolos, seguro que se han estado haciendo fotos fashion con los trajes para el catálogo de Revit! Apostaría lo que fuese!
Aunque el trozo más chulo ha sido desde las ruinas de Tharros hasta Bosa (pueblecito pesquero, destino final de hoy). El track iba en paralelo y muy cerca del mar. A muy poco metros. Nada de arena, sino tierra y piedras. Muy, muy bonito. Y divertido!
Etapa sin incidentes y llegada al hotel a una hora razonable. ‘Bufar i fer ampolles’ que decimos los catalanes.
Antes de terminar, quisiera romper una lanza en favor de David. Mientras el pobre me contaba diligentemente todo lo que habían hecho durante el día, los otros se le han comido el postre! Amigos para eso…
Y justo cuando revisaba mis notas antes de postear la crónica de hoy, me he dado cuenta que mañana va a ser la última etapa… Que rápido que ha pasado, verdad?!
Marta.
TRANSIBERICA 
Deja un comentario